primavera

no sólo el cuerpo siente el tibio

la mente también despierta y saca sus cachitos al sol

percibe, se agranda circular

casi siempre con algo de ayuda

vivir la primavera en soledad es acercarse un poco más a la galaxia que reside adentro

tengo confianza en lo creado
y soy crédulo de su existencia
la naturaleza es un papel texturado
la imaginación una caja metálica de colores

para mi: he dibujado paisajes diverjentes
para no vivir en la tibieza
mientras más siento que vivo
más se alejan los paisajes
uno lleno de fuego
otro lleno de frialdad

para que dejen de ser paisajes
he decidido montar una mochila e ir y explorar
camino hacia el fuego
hallo toda clase de mamíferos y táctos
una montaña de placer y calor de la cual sólo habito la falda
como las faldas no son de mi interés subo el cerro
desde el cerro, sin mirar atrás, descubro los detalles del paisaje
los colores que se combinaban en una composición lontananza

cuando llego arriba, en la cima, no veo el país vecino, sino más montañas
me desanimo, ya habrá tiempo para explorar
emprendo la vuelta
el mar se alejó considerablemente.
caminar agranda el radio de placer, pero de la misma manera de frialdad

el alma se expande circularmente
mientras más santo soy, más paseo por mis límites oscuros

le paso lapcito con destacador a "lo plástico", refiriendose al complemento de lo rígido.
puede ser la flexibilidad del arte plástico la q parezca tan atrayente por su simulitud inmensa con la libertad de acción, pensamiento y palabra, hablando de la libertad en serio (no solemne) donde se puede decir pico poto peo y amor sin que a nadie se le arrugue la cara.

glosoli - sigur ros